Bosque Mitago – Robert Holdstock

Guiwenneth era el mitago de mi padre, una chica de los tiempos romanos, una manifestación de la diosa Tierra. La joven princesa guerrera que, gracias a su propio sufrimiento, consigue unir a todas las tribus. —Como la reina Boadicea —señalé. —Boudicca —me corrigió Christian, antes de negar con la cabeza—. Boudicca fue un personaje histórico, aunque buena parte de su leyenda se inspiró en mitos e historias de Guiwenneth. No se recuerda ninguna leyenda sobre Guiwenneth. En su tiempo y en su cultura, sólo existía la tradición oral. Nunca se escribía nada. Pero tampoco hay referencias a ella de ningún observador romano, o cronista cristiano posterior. El viejo creía que las primeras leyendas sobre la reina Ginebra pudieron surgir en parte de las leyendas olvidadas. La memoria popular la ha olvidado…