Hijos de hombres – P. D. James

Yo creía comprender a ese tipo de gente: los pequeños burócratas de la tiranía, hombres que disfrutan de la mezquina recompensa de poder que les es permitida, que necesitan caminar en el aura de un miedo fabricado, saber que el miedo los precede cuando entran a una habitación, y que flotará como un aroma una vez que hayan salido, pero que no tienen ni el sadismo ni el coraje para la crueldad final. Pero necesitan participar de la acción. No les es suficiente, como lo es para la mayoría de nosotros, hacerse un poco a un lado y mirar las cruces sobre la colina