Historia del siglo XX – Eric Hobsbawm

Y, sin embargo, esta no era la revolución mundial como la había entendido la generación de 1917, sino el sueño de algo que ya no existía: muchas veces no era otra cosa que la pretensión de que, comportándose como si hubiera efectivamente barricadas, algo haría que surgiesen, por magia simpática. O incluso, al modo en que un conservador inteligente como Raymond Aron describió los «sucesos de mayo de 1968» en París, no sin cierta razón, un teatro callejero o un psicodrama